julio 12, 2010

Juan Lázaro: su amor a Rusia

El Diario/La Prensa de NY
Por Annie Correal y Catalina Jaramillo/edlp
12 de julio de 2010

Nueva York — No está claro donde nació Juan Lázaro, pero lo que sí quedó al descubierto fue su verdadero nombre, Mikhail Anatonoljevich Vasenkov, y su amor a Rusia.

Hasta antes de su arresto, ‘Juancho’ —como le decía su familia—, mantuvo que nació en Montevideo, Uruguay en 1943.

Habla inglés y el español fluidamente. Es de presumir que también sabe ruso.

La verdad es que ahora recuerdo que tenía ciento acento al comunicarse en español”, comentó una persona allegada a la pareja.

Vasenkov — de facciones europeas y ojos claros—, llegó a vivir en el Perú, donde conoció a Vicky Peláez en una asignación periodística.

En Lima trabajó como fotógrafo en distintos medios y era instructor y socio de una academia de karate en el distrito de Barranco.

Según un amigo de la época, Lázaro era cinturón negro. La familia de Peláez ha dicho a los medios que Lázaro decía que era huérfano e hijo único y que había tenido una infancia triste en Uruguay.

La familia de Peláez notó que ningún familiar de Lázaro, ni un amigo, había venido desde afuera del país para el matrimonio de éste con su hija.

Al radicarse en Nueva York con Peláez en el 1987, Lázaro continuó trabajando como fotógrafo y luego estudió en el Gonzaga University en Washington y en The New School en Nueva York, donde recibió su doctorado en Ciencias Políticas.

En el 2008 fue contratado por Baruch College para hacer un curso de Sistemas Políticos de América Latina y el Caribe por un semestre, pero no continuó por una mala evaluación. Según sus alumnos, era muy crítico con Estados Unidos. Vasenkov vivió con su esposa y su hijo, Juan Lázaro, de 17, en Yonkers hasta la fecha de su arresto.

Tras su arresto en junio, Lázaro supuestamente confesó su verdadero nombre y anunció su lealdad a Rusia. El 8 de julio del 2010, Vasenkov se declaró culpable del cargo de trabajar como agente no registrado para el gobierno ruso y formó parte de un intercambio de espías entre los Estados Unidos y Rusia.

annie.correal@eldiariony.com

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